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Estudio ecosistémico del lago de Pátzcuaro
FAUNAM y PG7 Consultores en 1996 para califi-
car la sustentabilidad de usos de la vida silves-
tre en México (proyecto A-001 de la CONABIO) y
sus versiones posteriores, las más recientes del
2008 y modificada en agosto del 2009 (Pérez-Gil
y Arroyo-Quiroz,
In prep.).
El sistema de calificación comparativa del grado
de sustentabilidad de proyectos, sirvió de base
para conformar una matriz de indicadores y así
evaluar alternativas de intervención propuestas
para incidir sobre las poblaciones de las espe-
cies exóticas particularmente de la carpa de Is-
rael.
Los criterios que se emplean en dicho sis-
tema de calificación se agrupan en 9 ámbitos:
Ecológico, Económico, Social, Cultural, Político,
Técnico, Legal, Temporal y Espacial. Los ámbitos
corresponden a lo que se consideran requisitos
sine qua non
de toda iniciativa que pretenda ser
sustentable. Los ámbitos corresponden a esla-
bones de una cadena que hay que ir manejando
de forma adaptativa, para acercarse a dicho ho-
rizonte, es decir fortaleciendo siempre al mas
débil según corresponda.
La fortaleza, cercanía o grado de propensión de
una iniciativa o proyecto para con la susten-
tabilidad dependerá del número de elementos
deseables que dicha iniciativa despliegue, mues-
tre, presente o contenga en todos los ámbitos
que delinean la sustentabilidad. Es precisamen-
te esa cercanía, grado de propensión o fortaleza
lo que éste sistema busca calificar (Pérez-Gil y
Arroyo-Quiroz,
In prep.
).
El resultado de aplicar el sistema de calificación
a una iniciativa o proyecto puede resultar inte-
resante para los ejecutores del proyecto porque
les permitirá detectar debilidades y ventanas
de oportunidad para la mejora continua en la
ruta a la sostenibilidad. Sin embargo, cuando el
resultado no se genera con ese propósito, visto
de forma aislada puede no tener aparentemente
ningún significado a menos que se le compa-
re con el o los resultados que se obtengan de
aplicar el sistema a otras iniciativas o proyec-
tos, en ese momento su riqueza y potencial de
calificación comparativa queda en evidencia.
Esta fortaleza que es función y característica
del sistema, es de particular relevancia para la
comunidad de donantes así como para quienes
realizan labores de monitoreo y evaluación de
proyectos (derivación de lecciones aprendidas,
intervenciones de control o corrección, incluso
reingeniería) o para quienes, además pretenden
fines de prospectiva, planificación estratégica o
promoción (por segmentos del mercado) (Pérez-
Gil y Arroyo-Quiroz,
In prep.
).
Las premisas del sistema de calificación com-
parativo del grado de sustentabilidad son las
siguientes:
a. Es un sistema de calificación comparativa
que busca contrastar iniciativas de proyec-
tos, acciones o actividades previstas en do-
cumentos de planificación como planes, pro-
gramas y estrategias.
b. No pretende evaluar los avances de los pro-
yectos, acciones o actividades enlistadas, ni
en calidad ni en cantidad.
c. Califica la naturaleza del proyecto/ interven-
ción o acción descrita.
d. No evalúa directamente las actividades, pro-
yectos, acciones o intervenciones realizadas
o por realizar.
e. No evalúa a las organizaciones o grupos eje-
cutores, responsables o participantes de di-
chas acciones, actividades, intervenciones o
proyectos.
f. Indirectamente, combinando con la estadís-
tica descriptiva y con otros análisis compa-
rativos (matriz de avance en el caso de algu-
na estrategia vigente por ejemplo) sí puede
dar cuenta de la “calidad” del avance de las
intervenciones-acciones.
g. Pretende dar cuenta de la fortaleza de las ac-
tividades, proyectos, acciones o intervencio-
nes en términos de su sustentabilidad.
h. La calificación obtenida equivale a una lec-
tura de brújula, ayuda a corregir el rumbo
hacia la dirección deseada.