305
Apreciación social del Cambio Climático.
Una aproximación a la población de la cuenca del río Usumacinta
más altos niveles de precipitación de toda Mesoamérica. Desde
nuestro concepto tanto la precipitación pluvial como la red
hidrológica son el resultado de millones de años de evolución en
las que las grandes masas boscosas y selváticas han jugado y juegan
un papel primordial y en donde todos los elementos entran en
juego para conformar las características peculiares de la región:
temperatura-clima-lluvia-masa vegetal han ido generándose-
modificándose juntos y se mantienen en una relación simbiótica
de larguísimo plazo.
La región es una de las zonas con mayor biodiversidad del mundo,
que alberga a la Selva Lacandona, reconocida por concentrar en
su seno el más alto grado de biodiversidad en el trópico con una
superficie que apenas representa el 0.16% del territorio nacional.
En ella habitan 28.4% de las especies de mamíferos, 31.8% de las
aves, 11.7% de los reptiles, 8.8% de los anfibios, 14.4% de los peces
de agua dulce (Instituto Nacional de Ecología INE, 2000, citado
por De la Maza y Carabias, 2011).
No obstante la enorme variedad de su fauna, en la región hay
muchas especies declaradas en peligro de extinción, como el
jaguar, tapir, puma, ocelote, tigrillo, tucán, pava, cojolite, boa,
cocodrilos de pantano y de río, venado cola blanca, temazate,
tepezcuintle, el armadillo y el mapache (Arreola
et al
., 2011),
todo debido a la actividad humana relacionada con la caza, la
extracción de especies, la pérdida de su hábitat y la competencia
con especies introducidas por el ser humano. Aunque no se tiene
un inventario sistemático de las especies exóticas invasoras que se
han introducido en la cuenca del río Usumacinta, se han registrado
ya varias que han causado estragos a la integridad ecológica en
distintas zonas. Por ejemplo, la introducción de tilapias en la zona
baja del Usumacinta derivó en una fuerte afectación del robalo
Centropomus undecimalis
, una especie anádroma (pez migratorio
