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Estrategias de adaptación al cambio climático
en el municipio de Emiliano Zapata
originados en el entorno. La vulnerabilidad, menciona el autor,
contempla la exposición a diversos riesgos sociales y naturales
que pueden afectar negativamente los ingresos, consumos y otras
dimensiones del bienestar material y no material de la población.
El concepto de vulnerabilidad social en el ámbito de las políticas
públicas puede ser útil de varias maneras, pero aquí lo recuperamos
primeramente en el sentido trabajado por Moser (1996), quien
contempló el concepto de activos y de vulnerabilidad para estudiar
la pobreza y su posible superación a través de la implementación
de estrategias provistas por los mismos sujetos. Para Moser, los
activos son recursos que permiten a los sujetos superar o reducir
los riesgos sociales frente a situaciones de pobreza. De manera
complementaria, Kaztman (1999) y Filgueira (2001) incluyeron
el concepto de “estructura de oportunidades”, condición para que
los activos funcionen y se posicionen en una estructura real de
oportunidades. Por estructura de oportunidades se entienden las
probabilidades de acceso a bienes, a servicios o al desempeño de
actividades que permiten o facilitan el uso de recursos propios,
mediante los cuales se pueden conseguir nuevos recursos (Cepal,
1999). Se trata de factores externos que el individuo no controla.
El enfoque integrado de activos, vulnerabilidad y estructura
de oportunidades (AVEO) contempla factores internos (activos)
y externos (estructura de oportunidades) para analizar la
vulnerabilidad más allá de un enfoque de riesgos, centrando la
atención tanto en los recursos que tiene la comunidad como en
la estructura de oportunidades que el Estado, el mercado o la
sociedad misma brinda a los sujetos para movilizar sus activos.
El conocimiento de los activos con los que cuentan los individuos
en una comunidad, la forma en que los gestionan y sus estrategias
de uso podrían ser un insumo fundamental en el diseño de
