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La cuenca del río Usumacinta
desde la perspectiva del cambio climático
son severos sobre la tasa de crecimiento de la planta y la mazorca
(Wilhelm
et al
., 1999), así como sobre la puesta y producción
de grano (Rattalino-Edreira y Otegui, 2013), pues elevadas
temperaturas afectan los procesos de polinización, fecundación y
desarrollo del grano, y desecan el polen y/o los estigmas (Wilhelm
et al
., 1999; Saini y Wesgate, 2000; Commuri y Jones, 2001;
Monjardino
et al
., 2005; Cicchino
et al
., 2010).
El principal efecto que tienen las elevadas temperaturas durante
la etapa sensible al estrés térmico (etapa reproductiva e inicios de
la etapa de llenado de grano y madurez) sobre los rendimientos,
se asocia con el acortamiento en el ciclo y fases de desarrollo
que reducen el tiempo de intercepción de luz, disminuyen el
número y el peso de los órganos reproductivos e incrementan la
esterilidad mazorca (Stone, 2001; Carcova y Otegui, 2001; Maestri
et al
., 2002).
A su vez, Neild (1980) y Neid
et al
., (1988) reportan que en el caso
del cultivo de maíz, la fase reproductiva y las etapas iniciales
de la fase de llenado de grano son críticas para determinar el
rendimiento en grano. Resultados de Rincón-Tuexi
et al
., (2006)
confirman que elevadas temperaturas en la fase reproductiva
reduce significativamente la acumulación de biomasa, el
rendimiento en grano, el número de granos por mazorca y el
índice de cosecha, reportado previamente por Badu-Apraku
et al
.,
(1983).
Cuando las temperaturas diarias son iguales o mayores a 35 °C
ocurren todos los efectos ya señalados por el aborto de los granos,
ocasionando la reducción de los rendimientos finales de hasta
38% (Crafts-Brandner y Law, 2000; Cheikh y Jones, 1994; Crafts-
Brandner y Salvucci, 2002; Cicchino
et al
., 2010; Rattalino
et al
.,
2011). Corroborando lo anterior, estudios en maíz en todo el
mundo indican que existe una fuerte correlación negativa entre
