Manejo de la recarga de acuíferos: un enfoque hacia Latinoamérica
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Figura 22.30.
Combinación de estructuras de parada para evitar la estratificación térmica y/o
hidroquímica, homogeneizando el agua de recarga y minimizando la disolución de aire de la
atmósfera.
Labrado de caballones en el fondo de las balsas de infiltración. El espaciado entre los surcos con
80 cm de distancia está dando los mejores resultados en cuanto a tasas de infiltración se refiere
(Fernández-Escalante & García 2009).
Soluciones tecnológicas de gestión:
Existe una serie de soluciones tecnológicas que se basan no en estructuras sino en parámetros de
gestión:
Control manual de la válvula de entrada en la presa de recarga. De este modo cuando el agua
del río tiene un grado de turbidez elevado se cierra la derivación durante días para minimizar
así una segura colmatación física. Igualmente se minimiza el riesgo de inundación en caso de
lluvias intensas. Durante ciclos de helada también son cerradas las válvulas de entrada para evitar la
precipitación de lentes de calcita a medida que el agua se va infiltrando y aumenta su temperatura.
Estos casos constituyen buenos ejemplos de la importancia de involucrar a agentes locales en el “día
a día” de los dispositivos MAR, siempre y cuando sea respetada la legislación vigente relacionada y
se tramiten los permisos de acceso y operación oportunos. Este tipo de gestión por parte de técnicos,
en general, carece de la agilidad necesaria.
La gestión manual de la válvula de entrada trae consigo condiciones de máxima eficiencia, por
ejemplo el caudal circulante tiene una relación directa con la tasa de infiltración porcentual. Los
